Sobre la Meditación

Sobre la Meditación


La forma y el fondo de cómo vivimos y lo que hacemos se refleja en la meditación.

¿Qué haces durante el día? Pero sobre todo, ¿Cómo lo haces? ¿Cuál es tu grado de presencia o de dispersión? ¿Cómo reaccionas, si es que reaccionas, a las vicisitudes diarias?…


En la meditación aparece lo que ya te sucede,

pero te paras para mirarlo…, para Verte. Aunque, al igual que en discurrir cotidiano, es probable que, consciente o inconscientemente, también en la meditación busquemos fugas, huidas del “insípido presente”: nos dormimos, o nos quedamos “en babia”, o nos enredamos en alguna elucubración, o nos “agarramos” a la respiración para no ver, o nos obsesionamos con la postura, etc.


La meditación no suele ser meditación, sino cierta purificación.

Purifico cuando miro y no reacciono con deseo o rechazo al objeto que tengo delante. Purifico cuando observo con lucidez y ecuanimidad.


Y cuando se ha limpiado al menos bastante “hojarasca”…,

entonces Vemos…o, más bien, sucede el Ver… Aparece el Silencio de fondo…, la Paz de fondo…, la Consciencia desnuda…

Es entonces cuando la meditación sucede…No meditamos… Desaparece el meditador y la Meditación sucede…

“Cuando se neutraliza la influencia de rajas (actividad) y tamas (inercia) la mente se queda inmóvil, como las aguas de un lago en calma. Entonces el meditador puede ver el fondo del lago y se le revela su verdadera naturaleza.”

Consciencia desnuda, el proceso de la meditación, de Swami digambarananda saraswati, danilo hernández

Para empezar a meditar

o, más bien, para empezar a acercarse a lo meditativo, se requiere de un interés por mirarse, un impulso interior de Ver, de querer Comprender.
Porque si lo hacemos por curiosidad, por entretenerse, porque esta tarde la tengo “libre”, o porque es una moda, o porque quiero que se me vayan los problemas, o porque he oído que con esta técnica voy a “estar bien”, o porque…, …
Sin ese impulso, sin esa “demanda interior” (aunque quizás al principio no sepamos que la tenemos), seguramente lo dejaremos enseguida.


Para meditar

o, más bien, para dejar que lo meditativo se infiltre en mi “casa”, he de quitar obstáculos, premisas, condiciones… He de acercarme con una actitud valiente e inocente, de apertura, de no saber.
Pero si no fuera porque me molesta la espalda, o porque se me duermen las piernas, o porque he quedado, o porque hoy estoy muy preocupada por un asunto, o porque es mi cumpleaños, o el de mi abuela, o porque estoy cansada, o porque es Navidad, o porque… No pasa nada. No te molestes contigo misma. No quieras hacer…lo que no quieres hacer. Simplemente aún no ha surgido el impulso,
no ha brotado el “ardiente interés”.


Un buen Hatha Yoga,

ese que invita a pararse y observarse, puede ser una preparación del terreno, puede ser el Tapas o práctica constante que, como dos palitos que se frotan y frotan, haga surgir la chispa que encienda un día la Demanda Interior. El Interior que empuja quizás con preguntas como “¿Quién soy yo?”, “¿Cuál es mi misión en la vida?”, “¿Es posible estar en Paz con cualquier circunstancia?”, “¿Puedo entrar y vivir desde lo No Manifestado, no visto, no olido, no tocado, no escuchado, no pensado?”


Si la meditación dependiese de que todo se arregle, de que se cumplan todas las condiciones que pongo en el “Contrato de mi editación”, de que el mundo se pare 20 o 30 min. porque “voy a meditar”…, entonces ¿cuándo empiezo?


Cuántas más condiciones pongamos a la meditación, más nos alejaremos de ella… O sea, cuantas más condiciones me pongo a mí mismo para Ser Lo Que Soy…,

más me alejo de Lo Que Soy.


Om shanti.

Escrito por José Blázquez, director de la escuela de Yoga Sati.

Qué es Trataka

Qué es Trataka

La concentración visual

Trataka significa “fijar la mirada”.

Dentro del Hatha Yoga, se incluye dentro de los Shatkarmas o limpiezas, ejercicios de purificación interna. Consiste en fijar la atención en un objeto o representación (estará a la altura de los ojos a la distancia de un brazo), intentando parpadear lo menos posible hasta que los ojos lloren. De esta forma, se limpian los ojos.

Dentro del Raja Yoga, la intención va más allá. Consiste en trabajar la concentración, sobre todo, la mirada interior.

En lo que concierne al trabajo de desarrollo interno, la práctica sistemática de trataka induce directamente la aparición de los estados de concentración y meditación.

Swami Digambarananda Saraswati-Danilo Hernández.

Consideraciones a tener en cuenta

Podemos fijar la mirada sobre cualquier objeto, preferiblemente que tenga algún valor o simbolice algo para el practicante (un yantra, un mandala, una llama, una bola de cristal, la representación de una deidad, etc…. También se puede elegir una zona del cuerpo también, como entrecejo o punta de la nariz.

Este objeto se colocará a la altura de los ojos a un metro/medio metro aproximadamente de distancia.

No se deben usar gafas o lentillas.

Si usamos objetos luminosos para la práctica, se deberá hacer un descanso cada dos meses.

Tipos de trataka en el Raja Yoga

  • Concentración externa-Bahir trataka
  • Concentración externa e interna-Bahir y Antar trataka
  • Concentración interna-Antar trataka

Bahir trataka

Cuando fijamos la atención ininterrumpidamente, sin parpadear, sobre un objeto externo. Es importante empezar poco a poco, sin forzar nada, con unos pocos minutos al principio hasta conseguir permanecer aproximadamente 10/15 minutos.

Después de un rato, cuando aparezcan las lágrimas, se cierran los ojos (podemos hacer un cuenco con las manos y tapar la cavidad ocular) y los dejaremos descansar hasta recuperarnos para continuar.

Bahir y Antar trataka

Generalmente, se usan estas dos combinaciones de concentración. Después de realizar Bahir trataka, cerramos los ojos y dirigimos la mirada interna al entrecejo. Aparecerá el “negativo” de la imagen que hemos estado mirando. Cuando esa contraimagen desparezca, abrimos los ojos y comenzamos de nuevo Bahir trataka.

Antar trataka

Visualización del objeto o imagen escogida en el entrecejo. Requiere de práctica, capacidad de visualización y una mente en calma. Una vez elegida la imagen interna, intentamos fijarla hasta su anclaje definitivo.

Esta práctica permite una mayor interiorización y profundización de la consciencia.

Swami Digambarananda Saraswati-Danilo Hernández.

Beneficios

  • Fortalece los nervios y músculos oculares.
  • Mejora la vista, sobre todo en casos de miopia.
  • Disuelve la tensión nerviosa y alivia el insomnio.
  • Tranquiliza la mente y mejora la memoria.
  • Aumenta la capacidad de concentración. Despierta el potencial latente en la ment y las facultades psíquicas -siddhis-
  • Equilibra al actividad de los nadis ida y píngala. Despierta sushumna nadi.
  • Activa ajna chakra y despierta la visión del mundo sutil. La energía que utiliza ajna chakra es la misma que utilizan los ojos en sus movimientos. Cuando los ojos se inmovilizan, parte de su energía queda disponible y se desliza hacia el centro más cercano, ajna chakra, el cuál se estimula, y acrecienta su actividad.
  • Trataka induce la aparición de los estados de concentración y meditación.

Puedes conocer y desarrollar esta práctica consultando el libro Claves del Yoga, teoría y práctica. Esta lista de beneficios están desarrolladas en este libro de forma sencilla y clara.

Y si quieres profundizar en otras técnicas que inducen al estado meditativo, te recomendamos Consciencia Desnuda, el proceso de la Meditación, ambos libros de Danilo Hernández.

Carta de Yoga 2024

Carta de Yoga 2024

Madrid, Septiembre-2024


¡Un cariñoso saludo y mis mejores deseos de que te encuentres en Paz!


“Atha yoga anuśasanam” (Yogasutras, I,1)


Así es como empieza el texto más importante el Yoga, el cual, aunque sea un texto de Raja Yoga (de meditación) contiene “dedos” que apuntan al resto de los principales Yogas: Karma Yoga ( la acción sin interés “personal”), Bakti Yoga (o devocional) y Gñana Yoga (el de la Comprensión que “libera”).


El Hatha Yoga, el que se suele practicar en las clases, con las distintas formas y variantes, es una base, una preparación, una plataforma para escalar hacia la cima del Raja Yoga (así lo dice, por ejemplo, el Hatha Yoga Pradipika, uno de los textos más importantes del Hatha). Por eso, todo practicante serio y entregado que profundiza en el Hatha Yoga, termina incorporando también el Raja Yoga en su práctica o sadhana. Como un buen bocadillo, el Hatha Yoga es el pan, un excelente pan, pero lo que va dentro es el “jamón vegetal y espiritual” (porque no sólo de pan vive el hombre).


Así, siempre es bueno mirar e investigar en este texto de Patanjali, porque aunque es para practicantes avanzados, también es una referencia para quienes sólo practiquen asanas, respiración, pranayama y relajación.


Dice entonces este primer sutra o aforismo que “Ahora” (atha) se van a dar las “Instrucciones o Enseñanzas” (anusasanam) sobre la “Unión o Liberación” (yoga). Ahora, cuando uno se ha preparado con otros Yogas (también con el Hatha)…; ahora, cuando ya se tiene un cierto grado de purificación…; ahora… las instrucciones concisas y contundentes para llegar a la cima del Yoga.


Muy bien. Pero ¿qué es el Yoga?


“Yoga chitta vrtti nirodah” (Yogasutras, I,2)


“Yoga es el cese (nirodah) de la identificación con las fluctuaciones o modificaciones (Vṛtti) mentales (chitta)”. Es decir, cuando se deja de estar identificado o apegado con los distintos estados mentales (que son cinco).
Cuando el sol de la conciencia brilla sin que ninguna nube opaque su esplendor, sin que ninguna clase de ignorancia (“avidya”) confundan al yogui con Lo que Es.


¿Y qué ocurre entonces, qué pasa cuando cesa la ignorancia que nos hace empantanarnos con los movimientos mentales o las expresiones de la consciencia (vrittis)?


“Tada drastuh svarupe’ vasthanam” (Yogasutras, I, 3)


Entonces (tada), el vidente o yogui (drastuh) se establece (avasthanam) en su propia Naturaleza Esencial, en su Verdadera Realidad (svarupe). Entonces, se deja de vivir en lo aparente, en lo falso, en la “ignorancia básica”… Entonces, por fin, uno vuelve a Casa, uno sabe Quién es, uno reconoce lo Real.


O sea, que vivimos alejados de Lo Que Somos. Por eso sufrimos, por eso estamos siempre insatisfechos, por eso vivimos desde la ficción de un ego (que genera karma).


Me acuerdo que a una pregunta que le hicieron a Nisargadatta (un maestro del Vedanta Advaíta) respondió: “Deja de buscar lo que no eres y encuentra lo que nunca has perdido”. Es una forma de resumir los tres sutras mencionados: el Yoga sucede cuando cesa la identificación con lo que no eres y entonces te encuentras con Lo Que Eres y Siempre Has Sido.


Bueno, dejamos ya a Patanjali. Todo lo anterior puede parecer muy profundo y alejado de una práctica “normal” con asanas, respiración, relajación, etc., pero es la dirección del Yoga. No importa si se utilizan unas u otras técnicas, o se explique de forma diferente en base a otros textos (como en el Tantra o el Budismo), pero es hacia Ahí, hacia este núcleo al que debe apuntar todo Yoga.


Es verdad que luego podemos practicar para relajarnos, estirarnos, aliviar el dolor de espalda, calmar la mente, fortalecernos, etc. Pero todo ello prepara, predispone, incita…Son pasos en el camino. Y la Atención ha de estar en cada paso, pero la Intención en el destino, en Despertar a Lo Que Soy.


Ánimo…, entusiasmo…. Sólo un paso de Consciencia, sólo un paso en el Camino tiene más valor y merece más la pena que toda una vida de inconsciencia. Porque el sentido de la Vida no está en tener éxito o estar “agustito” en este mundo siempre cambiante…, sino en vivirlo-trascendiéndolo.


Como es costumbre, me despido con un soneto yóguico, sobre una práctica que realizamos a menudo en las clases.


Om fraternal abrazo!
Ommm Shanti!

Fotos de https://www.freepik.es/

Viparita Karani Mudra

Viparita Karani Mudra

Hacia atrás del final de la partida,
con los pies al revés de lo acordado,
donde el Sol se entrelaza con la Luna
y la Luna se subsume en ella misma.


Junto al fuego paciente cocinada,
la burbuja de Dios se sutiliza
y regresa más leve por el cauce
que conduce al origen de esta vida.


Tras las duras etapas ultraalpinas,
que aflojan del sadhaka sus reservas,
con más luz y frescor regresa a casa.


Con más Luz y Frescor se intensifica
la sed por las alturas del origen,
la mitad de la Verdad entrevelada.

Carta de Yoga 2023

Carta de Yoga 2023

Madrid- Septiembre-2023

“ De lo irreal condúceme a lo Real

De la oscuridad condúceme a la Luz

De la muerte condúceme a la Inmortalidad

Om Paz, Paz, Paz.”

“Asato Ma Sad Gamaya

Tamaso Ma Jyotir Gamaya

Mrtyor Ma Amrtam Gamaya

Om Shanti, Shanti, Shanti”

¡Un cordial saludo amig@, con mis mejores deseos de que te encuentres en Paz!


Así, si tienes (si tengo) interés, echamos a andar.

El interés, el verdadero interés, la “demanda interior” (dice Blay) es la flecha, la punta de lanza del desarrollo en el Yoga (y en cualquier sendero espiritual).

Pero no es algo que dependa de la voluntad, del esfuerzo. Se tiene o no se tiene, ha surgido o no ha surgido… Surge o surgirá cuando se den las condiciones kármicas, cuando sucede algo así como un “clic” en que uno se cansa de dar vueltas en esta rueda o samsara de placer-dolor, éxito-fracaso, me gusta-no me gusta, vida-muerte, etc. Surge o surgirá cuando uno se cansa de la continua insatisfacción, se cansa de apariencias y sueños (maya), se cansa de no-Ser… Se cansa de correr y correr, o, a veces, de correr y buscar… Y no encontrar. Y no llegar.

El interés, el verdadero interés puede asomar la cabeza con algún shock de la vida: alguna enfermedad, accidente, muerte, crisis económica, etc. Aunque suele “esconder la cabeza” rápidamente, cuando viene la calma o anestesia después del mismo. A no ser que el “terreno” esté abonado, preparado para aprovechar ese impacto.

Pero claro, si el terreno está abonado, casi cualquier circunstancia puede ser el detonador. Por ejemplo, cuando todo te va muy bien, superbien…, y, sin embargo, sientes un vacío, una insatisfacción de fondo, un sinsentido interior…


Y entonces empieza la búsqueda. O también el detonador puede ser un “maestro”, o un libro. ¿Quién sabe?

¿Y si no se tiene esa demanda interior, ese punzante interés por crecer, por descubrir “Quién Soy Yo”, por sentirse Completo? ¿Se puede hacer algo? Sí y no.

No se puede hacer nada, porque cualquier cosa que se haga viene del ego, de la “persona”, de la ilusión…, y la “demanda interior” viene de lo que está más allá del individuo, viene de lo trans-personal. Queda rendirse, aceptar (“Ishwara Pranidana”, 5o Niyama de Patanjali), pero como esto no es una técnica, el ego no lo puede practicar (“ego” y “Aceptación” son contradictorios). Sucederá cuando se den las condiciones, cuando el fruto esté maduro.

Y, al mismo tiempo, sí se puede hacer algo, y es “practicar”, purificar los instrumentos (cuerpo, respiración, mente), preparar el terreno para que cuando surja la demanda, la Voz Interior, la Voz del Silencioso Amo…, los “sirvientes” estén listos.

En cualquier caso, aunque creamos que no se puede hacer nada, haremos algo (asanas, pranayama, concentración, meditación, autoindagación, etc.), porque el impulso kármico de “hacer” estará en nosotros hasta la Liberación.

Podemos decir en que hay una etapa en que estamos anestesiados, dopados, estamos en una “honda avidya” (ignorancia, oscuridad).
Luego, hasta que no sucede la llamada y practicamos Yoga (u otro sendero espiritual), en realidad, nos estamos preparando para él. Estamos “reconociendo la oscuridad”, reconociendo la “honda avidya”: no sabemos quiénes somos.


Más tarde, en algún momento, en alguna vida sucede la llamada… y es entonces, y sólo entonces, cuando comienza el Yoga.

Porque la llamada es la luz, la voz interior que nos guía, que nos motiva y nos impulsa… Aunque sea sólo una diminuta luz, esa luz es un anzuelo de la Verdad.

José Blázquéz García, director del centro de Yoga Sati.

Imagen de Sketchepedia en Freepik

Entrevista a Swami Digambarananda Saraswati

Entrevista a Swami Digambarananda Saraswati

Danilo Hernández

Esta entrevista fue realizada en el año 2001 por Julia Sánchez, socia honorífica de la APYM.

Pregunta: ¿Qué es el Yoga? ¿Cuál es su finalidad? 

Sw. D.: No es sencillo responder a esta pregunta con pocas palabras, pero resumiendo, podemos decir que el yoga es una ciencia que abarca e investiga todos los aspectos de la vida. Está basado en unas enseñanzas milenarias que incluyen un conjunto amplísimo de técnicas y actitudes que tienen como objetivo el desarrollo y el perfeccionamiento del Ser humano a nivel físico, mental y espiritual. En el aspecto individual, el yoga representa la propia posibilidad de crecimiento y la actualización y desarrollo de todo el potencial que contiene la persona. 

Pregunta: ¿Cómo ve nuestra sociedad el Yoga? 

Sw. D.: Cuándo yo comencé a enseñar hace más de veinte años, la opinión pública tenía una idea confusa y limitada de lo que es yoga. Había quién lo confundía con el judo, otros pensaban que se trataba de algo para relajarse, y mucha gente ignoraba por completo lo que era. Afortunadamente esta situación ha cambiado y en la actualidad la sociedad en general conoce el yoga, reconoce los grandes beneficios que reporta y lo que es más importante, un gran número de personas lo practican habitualmente obteniendo una gran mejora en su calidad de vida. 

El yoga se ha difundido muchísimo en los últimos años. La prueba es que su práctica ha sido incluida en todo tipo de estamentos; centros culturales, instituciones sanitarias, gimnasios, asociaciones de vecinos, parroquias etc. Creo que la impresionante expansión que el yoga está teniendo se debe, entre otras razones, a que las condiciones de vida se han vuelto un tanto inhumanas (stress, competitividad, artificialidad, desnaturalización del medio, consumismo exagerado, escasez de ideales etc.). Por este motivo la población en general y el individuo en particular necesitan de un medio que les ayude a desarrollarse equilibradamente y a recuperar el contacto con su propia naturaleza y con su verdadera identidad. Sin lugar a dudas, el yoga está demostrando que satisface esa necesidad  social. 

Pregunta: ¿Quién puede practicar yoga? 

Sw.D: Todo el mundo puede practicar yoga. En función de las características de cada individuo y de sus objetivos personales siempre hay un tipo de yoga adecuado para satisfacer dichas necesidades. En concreto, las prácticas del yoga físico y del yoga mental son recomendables y beneficiosas para todo el mundo. Es importante que estas técnicas sean correctamente adaptadas a las características y posibilidades de cada practicante. 

Lo mismo puede decirse del Karma Yoga que está basado en el despliegue de una actitud de máxima atención en todas las actividades que realizamos cotidianamente, así como en la actitud de servicio desinteresado. Podemos resumir diciendo que puede practicar yoga todo aquél que quiera mejorarse a sí mismo. 

Pregunta: ¿Tan importante es la respiración como para dedicarle un cursillo de fin de semana? 

Sw.D.: La respiración es la función fisiológica más determinante en la vida del ser humano. Si respiras mal vives mal, si respiras bien vives bien. La respiración es el soporte de toda nuestra actividad física y mental, de modo que tener una vida sana y feliz depende en gran medida de que seamos capaces de respirar correctamente  Aunque el ser humano viene de nacimiento preparado para respirar perfectamente, muchas veces esta función se va entorpeciendo y deterioro la aparición de bloqueos funcionales, tensiones emocionales y mentales etc. Se produce un círculo vicioso de modo que “cuando me tenso respiro mal, cuanto peor respiro más tenso” y así sucesivamente. El resultado es que la calidad de vida se empobrece en todos los aspectos. Lo peor de este asunto tan crucial es que nadie nos orienta ni ayuda a corregir y a mejorar la  respiración. Nadie nos enseña a respirar; ni los padres, ni los educadores, ni el médico, ni el cura, ni los políticos… 

Afortunadamente la práctica del yoga soluciona el problema rehabilitando la respiración deficiente o incorrecta y enseñándonos a sacar un provecho  óptimo de esta función vital. 

La respiración tiene muchas otras implicaciones importantísimas que no podemos analizar en una entrevista de estas características. Yo diría que el tema de la respiración es tan fundamental que merece muchísimo más que un fin de semana… 

Pregunta: ¿Cuál es el perfil del practicante de yoga? 

Sw.D.: Como existen diferentes tipos de yoga el perfil puede variar entre unos practicantes y otros. A nivel general podemos decir que el practicante de yoga es una persona que está trabajando para mejorarse a sí mismo y por tanto desarrolla un nivel de consciencia más elevado. Algunas cualidades que definen al buen practicante son las siguientes: un alto nivel de atención y discernimiento, ecuanimidad, tolerancia, solidaridad y espíritu de servicio desinteresado, apertura mental, eficacia en las actividades que realiza, alegría, sencillez y naturalidad etc. 

Pregunta: ¿Es compatible el Yoga con otras disciplinas o prácticas deportivas? 

Sw.D.: Es compatible y complementario. La práctica del yoga ayuda a optimizar el rendimiento en el trabajo, en el estudio y en la práctica del deporte en general. El adiestramiento en las técnicas del yoga físico y del yoga mental mejora la realización de cualquier actividad que desarrollemos. La práctica de las posturas de yoga proporciona flexibilidad, fuerza, resistencia, equilibrio, coordinación etc. Los ejercicios de respiración incrementan nuestro nivel de energía y equilibran el sistema nervioso. La relajación nos permite administrar adecuadamente el esfuerzo, mantener la mente serena y clara, descansar profundamente y recuperarnos del esfuerzo realizado en un tiempo muy breve. La concentración facilita y mejora la ejecución de mejora la ejecución de todo lo que realizamos. Desde hace muchos años el yoga forma parte del entrenamiento de todo tipo de deportistas de élite. Un buen ejemplo de ello es la selección nacional de esquí de Suiza y multitud de nadadores, tenistas y deportistas de primera fila de todo el mundo. 

Pregunta: En ocasiones oímos la palabra Maestro, Gurú… ¿Es necesaria la asistencia de un Maestro para practicar yoga? yoga? ¿Cómo podemos distinguir a un verdadero Maestro de un embaucador? 

Sw.D.: En la tradición oriental la palabra gurú significa maestro espiritual. En occidente ésta palabra se suele utilizar con un sentido peyorativo para designar a los líderes de diferentes grupos. Para iniciarse en la práctica de algunas técnicas yoga como las posturas o asanas, la relajación, la respiración, la concentración etc., suficiente con tener un buen profesor. El Maestro es necesario cuando se desea profundizar y obtener un crecimiento espiritual. Él es el único que puede guiar adecuadamente al aspirante hacia la última meta. El verdadero maestro posee nivel de consciencia muy elevado y se caracteriza por ser una persona sencilla,  compasiva, bondadosa y en cuyo corazón sólo existe el anhelo de ayudar a los demás.

Al embaucador se le reconoce porque suele alardear de ser un “salvador”, exige culto a su personalidad, persigue fines de lucro personal, tiene afán de protagonismo y utiliza medios de captación basados en una publicidad excesiva, engañosa o espectacular. En fin, que huele a falsedad y comercio. 

Pregunta: Groso modo ¿qué le ha aportado el yoga a nivel personal? 

Sw.D: Para mí ha representado una gran transformación. Antes de practicar yoga era una persona bastante insegura y con miedo al futuro. El yoga me ha aportado mucha alegría de vivir, el descubrimiento de las inmensas posibilidades que llevamos dentro, una buena salud, confianza en mí mismo, sentido de solidaridad, una vida más profunda y plena, etc. En mi calidad de profesor me ha permitido compartir mis vivencias con muchas otras personas y conocer a seres humanos maravillosos 

Pregunta: ¿Qué le recomendaría a las personas que quieren iniciarse en la práctica del yoga?. 

Sw.D.: Les aconsejaría que busquen un profesor honesto y competente y a ser posible que esté ligado a una escuela o enseñanzas reconocidas. Mejor si la escuela está cerca de su domicilio porque así se asegurarán una práctica más regular. Si el profesor o las enseñanzas no les convencen tendrán que seguir buscando. En Madrid esto no es ningún problema ya que hay muy buenos profesores difundiendo las enseñanzas del yoga. 

Actualmente Danilo Hernández es autor de dos grandes libros que os recomendamos: “Claves del Yoga, teoría y práctica” y “Consciencia desnuda, el proceso de la meditación